Substituir 30 minutos al día de sedentarismo por 30 minutos al día de actividad física moderada y vigorosa se relaciona con mejor salud cardiovascular
Un equipo liderado por el Instituto de Investigación Sanitaria Illes Balears (IdISBa), ha realizado un estudio para identificar cómo el sedentarismo y la actividad física pueden influir en el riesgo cardiovascular en la edad adulta. Entre todos los comportamientos analizados, la substitución de 30 minutos de sedentarismo por 30 minutos de actividad física moderada y vigorosa es el que muestra una relación más fuerte con la prevención de la aparición de factores de riesgo para la salud, como por ejemplo: el sobrepeso y la obesidad, el azúcar en sangre o el colesterol.
El artículo ha sido publicado en la revista International Journal of Behavioural Nutrition and Physical Activity, situada entre las 10 mejores revistas del mundo en nutrición y dietética. El estudio, liderado por la Sra. Aina M Galmés-Panadés y la Dra. Dora Romaguera, se basa en los datos de 2.189 hombres y mujeres, participantes en el PREDIMED-Plus (PREvención con DIeta MEDiterránea), con edades comprendidas entre los 55-75 años con sobrepeso u obesidad y síndrome metabólico, reclutados de 23 centros de investigación de toda España, incluyendo Baleares. Se tomó en consideración el tiempo dedicado por los participantes del estudio, a hábitos de vida distintos: el tiempo sedentario, el tiempo de actividad física (diferenciando actividad física ligera – por ejemplo caminar despacio, moderada – caminar rápido, y vigorosa – correr) y las horas de sueño. Para medir estos hábitos se utilizó un acelerómetro que registra los movimientos que realizaban en su día a día los participantes, durante 7 días. Por otro lado, la salud cardiovascular se midió con analíticas de sangre y densitometrías para conocer su composición corporal.
De acuerdo con los resultados del estudio, aquellos hombres y mujeres que pasaban más horas al día realizando actividades sedentarias, como puede ser mirar la televisión, utilizar el ordenador, o desplazarse en coche o autobús, tenían más factores de riesgo cardiovascular que aquéllos que permanecían menos horas al día sedentarios. Además, se analizaron diferentes combinaciones de hábitos de vida, y se comprobó que la substitución de 30 minutos de sedentarismo por 30 minutos de actividad física moderada y vigorosa mostraba una relación más fuerte con la prevención de la aparición de factores de riesgo para la salud, como por ejemplo: el sobrepeso y la obesidad, el azúcar en sangre o el colesterol.
Este estudio ha sido posible gracias a la colaboración de la investigadora del IdISBa, la Sra. Aina Galmés, con la investigadora de Reino Unido, la Dra. Verónica Varela-Mato, de la Universidad de Loughborough durante una estancia de 3 meses de la Sra. Aina Galmés en la Universidad de Loughborough.
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“Hay pocos estudios sobre la relación que existe entre el sedentarismo y el riesgo de tener una enfermedad cardiovascular, y muy pocos que estudien esta problemática en población adulta con sobrepeso u obesidad y con síndrome metabólico. El síndrome metabólico es un conjunto de alteraciones tales cómo el azúcar en sangre, colesterol o tensión arterial elevada que aumentan el riesgo de padecer enfermedades del corazón”, comenta Aina Galmés-Panadés, investigadora en el programa PREDIMED-Plus del IdISBa. “Además de conocer qué efectos negativos tiene el sedentarismo sobre la salud cardiovascular, hemos querido profundizar en cómo sería posible revertir estos efectos negativos, y parece ser que substituyendo el tiempo de sedentarismo por tiempo de actividad física moderada y vigorosa es la manera más efectiva para mantener la salud cardiovascular”, añade la Dra. Dora Romaguera, Investigadora Principal del estudio PREDIMED-Plus del IdISBa/HUSE.
El sedentarismo, una mala compañía
Según concluye la investigación, para mantener la salud y la calidad de vida en la edad adulta es crucial seguir unos hábitos de vida saludables: invertir pocas horas de sedentarismo, como puede ser mirar el televisor; realizar actividad física, mejor si se realiza a una intensidad moderada y vigorosa, y dormir las horas pertinentes.
Referencia
Isotemporal substitution of inactive time with physical activity and time in bed: cross-sectional associations with cardiometabolic health in the PREDIMEDPlus study.
Galmes-Panades et al. International Journal of Behavioral Nutrition and Physical Activity (2019) 16:137
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Repercusión en prensa:
Entrevista a Aina Galmés en el programa Vitamina 3: https://bit.ly/36vJZbt